Bajo el sol

 

7 de julio, martes. Boadilla del Monte-Fraga

Pernocta: polideportivo de Fraga (41.527900,0.342097)

Salimos el martes 7 de julio de Madrid con dirección a Gerona a Sant Pere Pescador. Otros años nos habíamos alojado un par de días en el camping Acuarius, nuestro preferido. Habíamos probado otros de la zona, pero este era el que más nos gustaba.  Pero las condiciones actuales para los que viajamos con peludos son duras. Para finales de julio ya prácticamente no tenían nada, pero lo que nos disuadió del todo es que habían agrupado las parcelas en las que se permiten perros en una zona sin sombra alguna, exceptuando una o dos, y no exagero. Aunque expuse mis quejas y motivos, me dijeron que lo habían estimado así por las quejas de los clientes. Además, alguien que lleve perro no puede seleccionar una parcela que no lo admita, pero alguien que venga sin él  sí puede seleccionar una de las destinadas a tener a estas mascotas, con lo cual, todo se reducía aún más.

Así que les desee suerte en su gestión y busqué otro posible pero por la zona. Sant Pere me garantizaba una playa tranquila, con poca gente, donde no iba a tener aglomeraciones y podríamos disfrutar de buenos baños.

Después pensé en las fechas y que  posiblemente a primeros de julio habría una menor afluencia, dispondríamos de más espacio y tranquilidad, así que me puse en contacto con el camping La Gaviota, en primera línea de playa también, y me dijeron que no había necesidad de reservar para esas fechas.

Dejamos Boadilla el martes a primera hora de la tarde para dormir en Fraga, en una zona deportiva junto al Ebro (41.527900,0.342097) para llegar al día siguiente al camping  alrededor de las 12.

La playa

8 y  9 de julio. Sant Pere pescador. Camping La Gaviota.

A nuestra llegada al camping, pudimos elegir entre seis o siete parcelas. La ocupación estaba al 60%, baja. Nos encontramos con un camping pequeño, tranquilo y muy agradable sobre todo dada la baja ocupación lo que garantizaba más la tranquilidad. Tras instalarnos quizás un poco cerca de la piscina, dedicamos el miércoles y el jueves a disfrutar del mediterráneo, de agradables baños, del sol, aguas tranquilas, arena blanca, playa con poca gente y  de la sombra de los árboles, del frescor del verde, de la lectura y de la tranquilidad. Me leí las guerras de Elena en esos días.